En el contexto de este mes de la Solidaridad, este sábado 26 de agosto se realizó la peregrinación anual al Santuario de San Alberto Hurtado, en donde el Pequeño Cottolengo de Cerrillos participó con la presencia de 6 residentes que asistieron como peregrinos, acompañados de profesionales del hogar y el hno. Javier Navarrete fdp.
Un rol especial tuvieron algunos de nuestros residentes en el desarrollo de la peregrinación. Es tradición que algunos peregrinos sean invitados a "tirar" la icónica camioneta verde del p. Hurtado, que va encabezando la peregrinación. Aunque la camioneta funciona, la tradición es que peregrinos la vayan tirando con cuerdas, ayudando a su desplazamiento, como custodios de la misma.
Incluso, alguno de nuestros residentes tuvieron el privilegio de ir arriba de la camioneta. Una alegría para nuestra familia espiritual, sobre todo porque peregrinaron por completo la distancia entre el Parque Almargo y el Santuario.
Ya en el Santuario, fueron recibidos con grupos y comunidades a cargo de la animación y música para darle ese ambiente juvenil tan propio de estas actividades y en donde nuestros residentes se lucieron participando de las actividades, cantos y bailes. Finalmente, la Liturgia presidida por Monseñor Celestino Aos, en donde el a través del signo del "aromo", entregado a cada una de las zonas geográficas en las que se organiza la Pastoral Juvenil. El aromo y el Padre Hurtado, es una tradición que viene de la poetiza Gabriela Mistral, amiga del sacerdote, quien al momento de su fallecimiento estaba fuera de Chile, no pudiendo asistir a sus funerales por lo que pidió que llevaran frente a su tumba, como un homenaje suyo, un aromo, para que fuera signo de una nueva primavera de crecimiento en el cuidado por los pobres y la solidaridad.
