“Verdad, Justicia y Reconciliación…” con estos tres conceptos el padre Felipe Valenzuela resumió su intervención en el interesantísimo diálogo que se desarrolló en la gélida mañana del 03 de julio en el Pequeño Cottolengo de Santiago.
El primer lunes de cada mes los trabajadores del Pequeño Cottolengo de Cerrillos participan de lo que se ha denominado “Encuentro de Formación Carismática”. Esta actividad consiste en proponer un tema de reflexión en el que se profundiza un rasgo particular de la espiritualidad y el carisma de nuestro padre fundador San Luis Orione. El objetivo de estos encuentros es dar significado y sentido al trabajo al interior del hogar, lo cual marca la diferencia de lo que implica ser parte de la familia Cottolengo. Es lo que llamamos “el 2%” esto es lo que nos diferencia de cualquier otra institución.
Desde el mes de marzo se han desarrollado distintas temáticas en los encuentros que no sobrepasan los 60 minutos de duración. La metodología de trabajo ha sido dinámica, lúdica y profunda, esto ha provocado que quienes participan de esta actividad valoren considerablemente lo que ahí se realiza.
En el último encuentro de formación, el trabajo estuvo ambientado en un programa de televisión estilo “late show”, es decir, un espacio propicio para la entrevista y la conversación. En esta oportunidad el tema de fondo fue DON ORIONE Y LA IGLESIA.
El panel de entrevistados estuvo compuesto por: Marcela Rojas (Psicóloga), Eliana Cárdenas (ATD), Miguel Ortíz (Periodista) y el padre Felipe Valenzuela (Superior Vice-Provincial).
Para abrir el diálogo, el animador Victor Fre (Encargado del Área Carismática) orientó las preguntas a la realidad que vive la Iglesia chilena en el último tiempo especialmente lo referido al tema de los abusos.
Los asistentes valoraron profundamente la oportunidad de poder preguntar y contra-argumentar lo expuesto por los penalistas. “Esto es un espacio al diálogo en temas que son profundamente delicados… se agradece la instancia.” declaró una profesional del Pequeño Cottolengo.
Sin duda que esta actividad sentó el precedente de que estos temas pueden y deben ser abordados al interior de las comunidades cristianas, ya que así hacemos iglesia con los hermanos que han sido afectados directamente con estos temas.